Hace tiempo quería postear esta frase que usamos en Chile y ahora que la usó mi amigo Rodrigo Hollmann mientras hablábamos por mensajería instantánea, la explico de una vez («al tiro«, como diríamos acá en el último lugar del mundo…).
Pues bien, para los chilenos estar «peinando la muñeca» es estar en un estado mental alterado, pero más que en euforia, en una especie enajenación, autismo y también locura, el que ya se ha extendido para personas que hablan estupideces o situaciones similares de perturbación de las facultades psíquicas…
Se puede también decir resumidamente como «Este (o esta) la peinan» y si es muy loco se dice «la peina pesado (pesa’o)». También sólo se puede hacer el gesto de peinar una muñeca para darse a entender.
Consultando al «profe» en su Ficha Pop del diario La Cuarta me doy cuenta de otra forma de decir esta frase, la que yo no conocía: «peinar la Barbie».
Corroboré allí también la versión que yo ya sabía del origen de este dicho, que creo que me había comentado mi amigo Fernando Meza: en la teleserie «Los Títeres» Gloria Münchmayer interpretó a una mujer que se volvió loca y apareció peinando una muñeca.
Algunos sinónimos para esta frase son: que alguien se raye (estar rayado), que a alguien le falte un tornillo, estar chalado o chalada (con su derivado «estar chalaila»), rallar la papa y algunas más que ya me acordaré.
Con mis amigos, cuando ya alguien está muy loco esta «rallando la muñeca» o «peinando la papa» (es decir, mezclamos el rallar la papa y peinar la muñeca)… eso ya es mucho…